«The Brutalist» no es solo una película, es un golpe directo al alma cinematográfica.
Brady Corbet, conocido por su enfoque meticuloso y provocador, nos entrega una obra monumental que se alza como un testimonio de ambición creativa, compromiso técnico y una narrativa que no te soltará ni siquiera después de los créditos.
Si eres de los que piensa que el cine está para sacarte de tu zona de confort, esta película será un regalo.
Con sus tres horas y media de duración y ese peculiar intermedio de 15 minutos, «The Brutalist» te lleva de la mano —o más bien, te arrastra— a través de una historia tan épica como desgarradora.
No es para todos, eso está claro, pero si decides lanzarte, te prometo que no saldrás indiferente.

Un viaje dramático cargado de historia y humanidad
La trama, que sigue a un arquitecto refugiado de la Segunda Guerra Mundial en su lucha por integrarse en la sociedad estadounidense mientras lidia con los ecos de un pasado desgarrador, es más que un simple drama histórico.
Es un mosaico de temas universales: el peso del trauma, la corrupción del alma bajo el capitalismo y la inalcanzable promesa del «sueño americano».
Pero cuidado: no te dejes engañar por el título.
Aunque verás destellos de arquitectura «brutalista», la verdadera construcción aquí es emocional, social y psicológica.
El espectáculo técnico
Visualmente, la película es una joya. Rodada en 35 mm y transformada a 70 mm, cada fotograma parece gritar su propia verdad brutalista: fría, monumental, impactante.
El director de fotografía Lol Crowley logra encerrar a los personajes en espacios que los hacen parecer diminutos, insignificantes frente a la inmensidad que los rodea. Es un espectáculo que te recomiendo disfrutar en la pantalla más grande que puedas encontrar.
La banda sonora de Daniel Blumberg es otro acierto monumental. Sus composiciones no solo acompañan la trama, sino que se incrustan en ella, logrando un diálogo casi visceral entre música e imagen.
Y si piensas que tres horas y media son mucho, el montaje de la película te hará cambiar de opinión: cada transición, cada ritmo, parece calibrado con la precisión de un reloj suizo.
Actuaciones que quitan el aliento
Adrien Brody se corona una vez más como un actor de calibre mayúsculo. Su interpretación está impregnada de humanidad, vulnerabilidad y una profundidad que pocos logran.
Te dolerá, te incomodará, pero sobre todo, te conquistará.
A su lado, Felicity Jones y Guy Pearce aportan interpretaciones sólidas que enriquecen la experiencia sin opacar el núcleo emocional de la historia.
No es para todos, pero quizá sea para ti
Te aviso desde ya: «The Brutalist» no busca complacerte. Busca enfrentarte.
Si esperas una experiencia ligera, probablemente no sea tu mejor opción. Pero si estás dispuesto a enfrentarte a un relato poderoso, lleno de complejidad y con una estética única, te garantizo que saldrás del cine transformado.
Te recomiendo verla en versión original.
El doblaje, por muy correcto que sea, no hace justicia a los matices culturales y emocionales que esta película demanda. En cada diálogo, en cada mirada, se esconde una riqueza que merece ser apreciada en su forma más pura.
Veredicto final
«The Brutalist» es un espectáculo cinematográfico que combina el drama histórico con un arte visual impecable.
No es perfecta, pero ahí reside su fuerza: en su capacidad de dejar cicatrices, de recordarte que el cine puede ser tanto entretenimiento como una experiencia transformadora.
Si decides aceptar el desafío, estarás frente a una de las películas más ambiciosas y potentes de los últimos años.
Nota: 8.5/10
- Título: The Brutalist
- Título Original: The Brutalist
- País: Estados Unidos
- Año: 2024
- Duración: 215 minutos
- Dirección: Brady Corbet
- Género: Drama
- Productora: Andrew Lauren Productions, Yellow Bear, Brookstreet Pictures, Intake Films, Killer Films, Protagonist Pictures, Three Zero Six Group, Proton Cinema.
- Estreno en España: 24 de Enero de 2025
